La falta de agua la provincia de Chiriquí se ha convertido en un problema generalizado, tanto en David, como en otras comunidades de la región. En estas condiciones, está el corregimiento de Rodolfo Aguilar, en el distrito de Barú.
Corozo una de las comunidades de este corregimiento, lleva más de 28 años sin agua potable. Sus moradores cuentan que los intentos han sido copiosos, pero nunca se ha podido abastecer de buena agua a toda la comunidad.
Alfredo Concepción, residente del área explicó que en años anteriores el Ministerio de Salud, intentó desarrollar un proyecto utilizando bombas eléctricas, pero estas se quemaron el día de las primeras pruebas. “En 1996 se intentó dotar de agua a la gente, a través de bombas a motor, más se quemaron (las bombas), ese mismo día y los posos nunca funcionaron”, comentó.
Después de esto, los anhelos de la comunidad señalada, por gozar de agua apropiada para tomar, los llevaron a conectarse al servicio del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales, pero nunca les ha llegado suficiente presión. En ocasiones ni les llega, por ello muchos han rescindido de los contratos respectivos, porque a juicio de ellos era pagar por el gusto.
En Sangrillo nos es tan diferente. Existe una tubería, llena de polvo literalmente. La planta potabilizadora de Paso Canoas, no logra abastecer estas líneas. Esta comunidad, desde 1984 depende de los pozos brocales. Los moradores que no poseen agua propia, son apoyados por los vecinos. “Dependemos de los pozos, los que no tienen, acuden a los vecinos para proveerse de agua”, dijo Mario Meléndez un lugareño.
Son alrededor de 250 familias en estas dos comunidades. Cincuenta de ellas en Corozo donde además, existe una escuela y un colegio; y otras doscientas familias en el área de Sangrillo, los cuales, según Zenón González, director del IDAAN, se están incorporando a la red.
Por el resto del área bananera, no existe interés de parte de la institución ya que, esta región es un área subsidiada, comentó González. “Estamos enfocándonos en Puerto Armuelles y Manaca, en el área bananera, no tanto”, indicó. Adujo debido que es un área subsidiada, los residentes no muestran voluntad de pagar las tarifas que la institución cobra.
Leoncio Lizondro, representante de corregimiento de Rodolfo Aguilar, lamentó la situación y dijo que el Estado a través del IDAAN, tiene el deber de proveer de agua a los ciudadanos que residan dentro del territorio nacional.