Ring y velada boxística eran sinónimos en la provincia de Chiriquí, por ello muchos de los peleadores del patio, desconocían la forma en que debían desempeñarse arriba del tinglado. Desde la instalación del ring primer ring fijo, las cosas muestran una mejoría, señala Carlos Núñez entrenador de boxeo de esta región.
La idea que tenían los boxeadores del resto del país en cuanto a la falta de experiencia de los púgiles chiricanos en los tinglados, se irá disipando luego de la instalación del primer cuadrilátero fijo en la provincia.
Las instalaciones que nacieron bajo la iniciativa de empresarios como Jorge Chisaca y Eddie Caiña servirán para preparar las generaciones de boxeadores chiricanos que se inician en este duro deporte.
“Tenemos entre seis a siete meses impulsando este proyecto”, comenta Jorge Chisaca, quien a su vez indica que la idea surgió a mediados del año pasado, a raíz de las carencias que afrontaban los amantes de los guantes y las narices chatas. “Ver que existían prospectos que se inclinaban por el boxeo y no tenían sitio en donde practicar adecuadamente, nos motivó a invertir en la juventud, en este deporte”, dijo.
Por su lado Eddie Caiña señala que el cierre del gimnasio escolar potenció la cristalización de este proyecto, el cual ya venían considerando ejecutar. “Con el cierre del Gimnasio Escolar, decidimos echar a andar este proyecto, hasta ahora ha tenido mucha aceptación”, señaló Caiña.
Aunque la inversión es cuantiosa, los empresarios que no revelaron el costo del entarimado; no obstante aseguraron que el proyecto se realizó con fondos propios sin la ayuda de ninguna entidad. “Aunque somos empresarios con poco potencial económico, decidimos invertir para que las generaciones de jóvenes tengan un sitio en donde practicar al box”, resumieron.
Aprender a caminar el ring conocer los movimientos y diferenciar las superficies entre el piso y la lona, era una de las deficiencias que presentaban los boxeadores de Chiriquí cuando peleaban con otros púgiles del reto del país. Con el nuevo enlonado, los peleadores no tendrán necesidad de padecer los mismos estigmas.