Ángel, Maritza, y Orlando, son tres hermanos; aparte de su grado de consanguinidad, algo más en común los mantiene unidos, todos ellos se han quedado ciegos, sin poder distinguir la diferencia entre el día y la noche.
Estos humildes chiricanos, residentes en Río Mar, Corregimiento de Puerto Armuelles, distrito de Barú; nacieron del seno matrimonial que conformó en su momento Arturo Villarreal (q.e.p.d.) y Paulina Núñez.
Según cuenta Paulina, quien actualmente tiene 80 años; sus tres hijos a una edad muy temprana, comenzaron a padecer de cataratas en los ojos y ahora que son adultos han perdido la visión totalmente, añade que ella no puede trabajar y no ha recibido ningún tipo de ayuda, solamente pequeños aportes del representante, los cuales alivian muy poco la situación en el hogar.
Cuenta la anciana que ella, está inscrita en el programa 100 a los 70; sin embargo aclara que ese dinero no es suficiente para subsistir, pues aparte de la alimentación; cuando sus hijos se enferman, debe llevarlos al hospital pero por no contar con seguro social, debe comprar los medicamentos y pagar al menos cinco balboas de taxi.
La situación de esa familia es compleja, declara Núñez que ha recibido reportes de médicos cubanos, asegurando que la enfermedad por su acelerado avance no tiene cura, entre tanto Paulina; a quien también se le ha diagnosticado problemas en la vista, en el corazón, en la columna y en los pulmones, apuesta a la generosidad de sus vecinos, ya que a la fecha ninguna entidad gubernamental le ha dado respaldo.
Actualmente Ángel Villarreal de 60 años, Maritza Villarreal con 51 años, y Orlando Antonio Villarreal de 49 años, abrigan la esperanza que alguna mano amiga, gubernamental o de la empresa privada, volté la mirada hacia ellos; y le brinden alguna herramienta de trabajo, para ganarse el sustento diario.
Usted está aquí : El Informe de David » Sociales » Anciana solicita ayuda para sus hijos ciegos
Segui @elinformedavid
Deja un comentario
Buscar