Oriunda de la comunidad de Dominical de Renacimiento, Griselides Gómez Sánchez no olvida como su vida cambió; luego que se le diagnosticara una rara enfermedad en la piel, desde esa época aseguró; Dios, su familia, vecinos y amigos, nunca la han dejado sola en ese difícil episodio, que según cuenta comienza a cambiar positivamente.
Según relató Gómez el síndrome de Kimblerg, enfermedad que para la ciencia médica no tenía cura, se le descubrió a una edad de 23 años cuando su cuerpo se brotó de llagas, “las primeras me salieron en el pectoral, pero luego me cubrieron por completo, yo me sentía mal, enferma y agotada, pero ahora todo va mejorando”, decía con una alegra sonrisa.
Para Griselides, convivir con la enfermedad no ha sido fácil, era muy joven cundo fue atacada sorpresivamente, las circunstancias la obligaron a buscar medicina y tratamiento, sin embargo sus constantes recaídas no permitían una mejoría, por lo que la dejaron quieta por algún tiempo, y cuando fue referida con un reconocido dermatólogo chiricano; todo evoluciona positivamente.
Griselides Gómez es testimonio de su propia vida, expresa que cuando su doctor la examinó por primera vez, los medicamentos recetados (pastas, pastillas, medicinas para sangre) han obrado positivamente y ahora se siente mejor, aun así sus metas y aspiraciones no serán posibles sin la ayuda de un buen samaritano, comenta que tramita la compra de un terreno para construir una vivienda digna, con servicios básicos de agua y luz, ya que según indicó; solo recibe ayuda del representante de corregimiento.
“Yo anhelo que me ayuden, quiero avanzar y vivir mejor”, dijo la madre de dos infantes que no pasan de seis años de edad, agrega que para sobrevivir se dedica a cultivar la tierra junto con su esposo, y sus vecinos más cercanos son sus padres y sus hermanos, los que siempre le han tendido una mano.
Casos como el de Griselides Gómez son difíciles de encontrar en esta región del país, según destacó; algunos reportes médicos señalan que su enfermedad es bastante extraña, y ha causó asombró en muchos especialistas, pero después del tratamiento todo ha sido diferente.