Maquinarias, fuego, sudor y machete, se conjugarán para completar la faena en el inicio de la temporada de zafra de la caña de azúcar, en la Central Azucarera de Alanje; ingenio que procesa el 13.67% del total de la producción nacional.
Todos los años, la apertura de esta temporada de cosecha, contribuye al incremento en la economía del sector; así como también en los pueblos circunvecinos y en aquellos, no tan cercanos, quienes ven en la actividad, una opción para hacer frente a las necesidades que demanda el núcleo familiar.
Este año se pretende segar 420 mil toneladas métricas, lo cual equivaldría a unos 850 mil quintales de azúcar sin cristalizar, es decir en su estado liquido. Para ello, se tuvo que plantar 4 mil 100 hectáreas de la (Saccharum officinarum), por su nombre científico. De esta cosecha, el 40% se destinará a las exportaciones, mientras que el resto, al mercado nacional.
La otra cara de la moneda, se refleja en las poblaciones cercanas, quienes aseguran que las quemas de los cañaverales, les afecta año tras año, a pesar que Cadasa asevera que las chamuscas, se realizan de manera controlada, para evitar perjudicar a los residentes.
Se estima que la cosecha dure unos 75 días, conforme se informó a esta redacción, vía telefónica.
En otros países, como Brasil, la caña de azúcar se emplea como materia prima para la fabricación de combustible alternativo.