El corregimiento de Divalá es uno de los más antiguos del distrito de Alanje, con una población de 6 mil 256 habitantes, según la Contraloría General, quienes en su mayoría se dedican a la ganadería y agricultura como medio de subsistencia.
Pero, a través de su historia, el motor de la economía lo constituyeron las 14 fincas bananeras que allí se establecieron durante el año 1960, y que para el año 2000 ya estaban en franca decadencia, lo que produjo su cierre.
Y esto ha causado la falta de empleos, salud, oportunidades debido al cierre de las bananera años atrás lo que ha provocado que miles de familias no tengan hoy el sustento para sus familias. Pese a que a la zona han llegado empresas y que el cultivo de la palma aceitera está en su mejor momento, la situación no prospera.
La representante de Divalá, Melva Aguilar, manifestó que la próxima semana un grupo de la comunidad, en compañía de una comisión del Sindicato de Trabajadores de las Bananeras Independientes de Chiriquí, (SITRABICH), visitará la Asamblea Legislativa, para que se declare este corregimiento zona de emergencia, porque la población está pasando por muy malas condiciones.
Los residentes aseguraron que la gente tiene serios problemas con el agua, ya que la sacan de pozos que construyen ellos mismos, lo que incide negativamente en la salud de los infantes.
Ademas moradores le Le hacen el llamado al gobierno para que mire más a esta comunidad en Divalá que está necesitando con urgencia más respuesta, en donde conviven familias indígenas y latinas en condiciones muy difíciles.