La obesidad se ha convertido en una de las mayores amenazas para la salud de millones de personas, advierte la Organización Mundial de la Salud (OMS). Panamá no escapa a este panorama, a pesar de que es un país en vías de desarrollo comparte cifras similares con los países del primer mundo.
Durante los cinco primeros meses del año en curso se registraron en la provincia de Chiriquí 6 mil 892 nuevos casos de obesidad, teniéndose que, de cada cuatro casos, tres corresponden a pacientes del sexo femenino.
Investigaciones realizadas por los ministerios de Economía y Finanzas y de Salud coinciden en que el Estado panameño invierte anualmente 450 millones de dólares en el tratamiento de enfermedades relacionadas directamente con la obesidad.
Mientras que un estudio elaborado por el Ministerio de Salud (MINSA) sobre el estado nutricional entre niños de 5 a 9 años sobre el Índice de Masa Corporal (IMC) señala que un 11.2% de los niños está en riesgo de sobrepeso. Mientras, el 8.8% presenta serios niveles de sobrepeso.
Hoy en día la expectativa de vida es 75 años, pero los problemas vasculares siguen siendo un problema. No obstante, los tumores malignos son una causa de muerte que rápidamente cobra más relevancia y, recientemente, hay evidencia que el sobrepeso y obesidad están vinculados a algunos cánceres, como: el cáncer de colon y recto, el cáncer de mama (en mujeres posmenopáusicas), el cáncer de endometrio, el cáncer de riñón, el cáncer de esófago, la unión gastroesofágica y de la primera porción del estómago (cardias), el cáncer de páncreas, el cáncer de vesícula biliar y el cáncer de hígado.
En Chiriquí, las causas más comunes de enfermedad cardiaca son los factores de riesgo como el uso del cigarrillo, diabetes, obesidad, colesterol y sedentarismo, que pueden provocar el desarrollo de enfermedad cardiovascular.
Solo en la provincia de Chiriquí, dijo Girón, 188 personas sufren de insuficiencia renal crónica, situación que las hace depender indefinidamente de hemodiálisis o de diálisis peritoneal, procesos que periódicamente suplen las funciones básicas de los riñones.