La falta de recurso humano, desventaja que presenta la Autoridad del Ambiente en Chiriquí, propicia que cada día se incremente la tala indiscriminada, actividad furtiva que está acabando con el hábitat de numerosas especies de aves e insectos y todo bajo la complicidad de las comunidades vecinas en donde se registran estos hechos.
Rodrigo Agrazal Director Provincial de la Autoridad del Ambiente, indicó que la supervisión del área boscosa en esta provincia se torna difícil, ya que solo mantienen 17 guarda parques, en toda la región y en parte de Bocas del Toro. Por ese motivo, señaló el importante papel que juegan las denuncias ciudadanas, para el decomiso y prevención de la desforestación o tala ilegal.
Indicó que sin el apoyo de la comunidad se imposibilita, en grado mayor, la función de esta entidad encargada de garantizar el bienestar del ambiente y las personas que lo habitan.
Referente a las presuntas talas registradas en Potrerillos a fines de noviembre, en Alanje y en el Mirador (Vía volcán), por la misma fecha, dijo desconocer totalmente, el hecho. Agregó, que los supervisores no pueden estar en todos partes, al tiempo que recalcó lo importante que sería la voz de la comunidad, para empezar los operativos e investigaciones, en caso de estos ilícitos.