La colocación y remplazo de hidrantes en la ciudad de David, pretende dar mayor seguridad a las infraestructuras de la urbe, en caso de algún siniestro, sin embargo, la vulnerabilidad de las estructuras, no radica en la existencia de hidrantes nuevos o viejos, sino en la poca presión de agua que existe en las líneas de conducción del líquido.
Esta aseveración se vio respaldada, la mañana del jueves 25 de abril, cuando se generó un incendio en el distrito de Boquete y se hizo necesario el apoyo de los camisas rojas de David. Cuando los apaga fuegos volvieron para abastecer las cisternas, la presión del agua era mínima.
-Conéctala en la válvula más pequeña-dijo uno de los bomberos. A la distancia se podía ver que la manguera fue conectada en el dispensador de 1 ½ pulgada y aun así, la presión del agua no era suficiente. El carro tardó más de la mitad de lo que normalmente, tomaría llenarse, según comentó el uniformado, quien pidió reserva de su identidad.
Al final, se logró sofocar el incendio, no sin que antes el fuego consumiera una gran extensión de la vegetación.
Hasta el momento se han reemplazado unos 20 hidrantes en toda la zona urbana de David, según lo manifestó Zenón González director regional del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales.
“Los hidrantes fueron removidos, ya que presentaban deficiencias en la válvula central, lo cual permitía el desperdicio de agua”, dijo González. De acuerdo con el director regional de esta entidad, estas deficiencias afectan a los carros cisternas al momento de abastecerlos.
Se conoció que cada hidrante que se reemplace, presenta un costo aproximado entre mil a 1500 dólares.