En un mundo convulsionado por la las olas de violencia y las grandes guerras y rumores de guerras, que se yerguen sobre la tierra, se hace necesario crear conciencia y sentar las bases para cimentar en los más jóvenes, una cultura de paz que permita la coexistencia de la raza humana, sin distingos de clase social, credo o inclinación política. Con esa idea, se realizó, en días pasados el foro Cimientos para una Cultura de Paz, en la Universidad Autónoma de Chiriquí.
Con la intención de bosquejar una idea más clara sobre la importancia de alcanzar y sostener paz entre los congéneres de la humanidad, los organizadores, agruparon a personajes de las distintas áreas del humanismo. Tal fue el caso del literato chiricano, Dimas Lidio Pitty y la historiadora Milagros Sánchez Pinzón, entre otros que hicieron también, aportaciones sustanciales al tema.
Rafael González, representante de la Soka Gakkai Internacional de Panamá, subrayó la necesidad de realizar eventos similares, para impulsar la cultura de paz y cultivar el humanismo. Expresó su complacencia, ya que fue la primera vez, que una actividad como ésta, se desarrolló en Chiriquí.
La Soka Gakkai, mantiene presencia en 192 países y aglutina cerca de 12 millones de miembros, personas preocupadas por la paz mundial y el bienestar individual de los ciudadanos del mundo. La sede central
Al concluir las disertaciones de los expositores, se abrió el compás para los cuestionamientos e inquietudes. Preguntas que fueron canalizadas, a través de un moderador que leía, lo inquirido al panelista señalado, y este último, se dirigía a la audiencia de manera general.
Después, como es lógico, llegó el momento de las aportaciones finales, donde los oradores de la tarde, sintetizaron sus discursos en breves palabras.
Paul Bocanegra, señaló que la mejor forma de conseguir la paz es mentalizándose, en que el camino hacia la consecución de esta condición es difícil, pero se necesita de agentes perseverantes.
Como un trabajo conjunto y sistemático, calificó Lisbeth Samudio, al proceso para llegar a la paz. “El problema no es obtener la paz, sino sostenerla”. Por ello, sugirió sembrar en los niños, para cosechar pacificadores en el futuro.
Por su lado, Milagros Sánchez, indicó que involucrar a los jóvenes y niños en acciones colectivas, sociales y concretas fortifica los vínculos de la paz. Trajo a colación una frase de Juan Pablo II, la cual reza” Globalicemos la solidaridad.
En tanto, el escritor Dimas lidio, recalcó la preponderancia de respetar las conciencias de los otros. “Necesitamos ser tolerantes, recordemos al Benemérito de la Américas, quien sostuvo que el respeto al derecho ajeno es la paz. Sin este principio es imposible alcanzar este bien espiritual.
Cabe resaltar que dicho foro, fue coordinado por la Facultad de Humanidades, por intermedio del profesor Roger Sánchez, decano de esta unidad académica.