Tom MacCormack Un hombre dedicado a los que más lo necesitan

En 1994 llega a Panamá por primera vez, Tom MacCormack, ciudadano estadounidense nacido el 3 de noviembre de 1945, en el estado de Pensilvania. Llega a la ciudad de Panamá como técnico en abejas africanizadas de un programa llamado Agritor de Agritor. En ese entonces, solo se quedó dos semanas en el país. Pero dijo haberle gustado mucho esta tierra, por lo que los siguientes años siguió visitando dos semanas por año. MacCormack también fue técnico de aviones de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos, donde prestó sus servicios por más de 20 años, siendo convocado también a la guerra de Vietnam como mecánico de los aviones y helicópteros enviados a la batalla.

EID: ¿Cómo llega Tom a Panamá?
TM: llegué sabiendo sólo 4 palabras: si, no y taco bell; ¿sabes que es taco bell?, nos preguntó, es un restaurante mexicano de la ciudad de Panamá, dijo entre risas.

Este señor de buen corazón, tiene una fundación que creó junto a su esposa la cual llamó “MacCormack Foundation”, fundada hace seis años, después que se jubilara de su larga vida de trabajo. La misma tiene extensión en los Estados Unidos, la cual su esposa maneja.

La fundación consiste en ayudar a personas con problemas de discapacidad, que no tienen como adquirir sillas de ruedas, prótesis para piernas, prótesis mamarias, andaderas y muchos más equipos que son de uso para personas con limitaciones corporales.

EID: Cómo nace este proyecto?
TM: Es una historia muy bonita, un día me subí a un taxi y charlé un poco con el conductor y me dijo que tenía un familiar que se había sometido a una mastectomía y que se sentía con mucha pena al no tener su seno, me quedé pensando en eso que me dijo ese hombre y regresé a mi país, allá hable con una amiga y le pregunté dónde yo puedo conseguir una prótesis de mama y me dijo que ella tenía dos, que pertenecieron a su madre que había fallecido dos años atrás. Ella me dijo te las puedes llevar; me puse contento; al volver a Panamá busque a ese taxista, con quien había hablado y le obsequié las prótesis, el hombre se puso muy feliz y mucho más por la mujer que la necesitaba, porque así ya no volvería a sentir pena de salir a la calle.

El señor Tom nos comentó que desde entonces ha ayudado a muchas personas en la provincia de Chiriquí, con equipos que regala sin ningún costo, a familias de escasos recursos. Dijo que para la primera semana de diciembre vendría el octavo contenedor que pedía desde que empezó su fundación, con muchos equipos que servirían a más personas que lo necesitan.

EID: ¿Alguien ayuda a su fundación y de dónde Tom MacCormack genera el dinero para llevar a cabo esta linda obra?
TM: Nos contestó que a él nadie lo ayudaba con los gastos de los equipos, todo es de mi bolsillo, expresó. Mi fundación existe gracias a un negocio que tengo en mi país, ese negocio es de exportación de miel, yo tengo un criadero de abejas que fabrican la miel que exporto a muchos lugares.

EID: ¿Cuánto es el gasto de los contenedores que trae a Panamá?
TM: Dijo que alrededor de 6 mil dólares costaba cada contenedor que entraba al país.

De acuerdo a MacCormack habló con muchas personas, la cual no diría nombres, que dijeron ayudarle, sin embargo, si veían que él no daba más dinero, ya no sabía más de ellos, pero esto no lo hizo claudicar de su decisión de seguir ayudando.

Una de las cosas que nos llamó poderosamente la atención fue una vivencia que tuvo con unos niños, los niños preguntaban porque su corazón sonaba tic tac y él les respondió que se había tragado un reloj y por eso su corazón sonaba así. El señor Tom fue sometido a una operación donde se le adaptó un marca paso, ya que tenía un problema cardíaco.

También le contó a El Informe de David, que él se sentía parte de este país, principalmente de esta tierra chiricana, la cual, con mucho orgullo, aseguró ser un gringo-chiricano, y que Panamá le hacía fiesta, desfiles y bailes, todos sus cumpleaños, envuelto en risas, ya que como dijimos cumple todos los 3 de noviembre.

Este hombre, Tom MacCormack, quien sus raíces son de otro país, ha dedicado su tiempo y su vida al bienestar de los panameños, dijo sentirse complacido con su obra y que su sueño era llegar a concretar el proyecto de prótesis de piernas y mamas, sueño que dice muy pronto logrará con la ayuda de Dios.

Este medio quiere mediante estas historias enaltecer el valor de personas como el señor Tom MacCormack, que se dedican en cuerpo y alma hacer el bien sin mirar a quien. Personas como MacCormack hacen un ejemplo a las futuras generaciones y llena de satisfacción a nuestra provincia.